Las competencias digitales o digital skills ocupan un lugar destacado en la agenda de los departamentos de RRHH de todo el mundo.
A aquellas empresas que no se encarguen de que sus empleados desarrollen estas habilidades o de contratar nuevos recursos que sí que cuenten con ellas, les costará seguir siendo competitivas.
Las competencias digitales se pueden definir de varias maneras. A continuación podemos ver algunos ejemplos disponibles en Internet:
- Habilidades necesarias para utilizar dispositivos digitales, programas de comunicación y redes para acceder y gestionar la información, de simples búsquedas online al envío de e-mails o programación avanzada.
- Capacidad de encontrar, evaluar, utilizar, compartir y crear contenidos utilizando dispositivos digitales como ordenadores y smartphones.
- Conocimientos y habilidades necesarios para un uso óptimo de las tecnologías de la información y la comunicación. En su conjunto, incluye la alfabetización digital, el trabajo en red, la capacidad de comunicación, la generación de contenidos, la seguridad digital y la capacidad de resolver problemas en contextos virtuales.
- Conjunto de habilidades que permiten que una persona haga un uso estratégico de la información mediante las tecnologías de la información.
- Habilidades necesarias para el uso de las tecnologías digitales.
Una definición bastante completa es la que proporciona la UNESCO:
Las competencias digitales se definen como un espectro de competencias que facilitan el uso de los dispositivos digitales, las aplicaciones de la comunicación y las redes para acceder a la información y llevar a cabo una mejor gestión de éstas. Estas competencias permiten crear e intercambiar contenidos digitales, comunicar y colaborar, así como dar solución a los problemas con miras a alcanzar un desarrollo eficaz y creativo en la vida, el trabajo y las actividades sociales en general.
Las competencias digitales se suelen dividir en dos categorías, básicas y avanzadas, una subdivisión que también utiliza la UNESCO.
Competencias digitales básicas
Las competencias digitales básicas son aquellas que cualquier persona debería poseer para adentrarse en el mundo laboral moderno.
El Ministerio de Educación del Reino Unido ha creado, junto con Accenture y otras empresas, un marco que clasifica las competencias digitales básicas en otras 6 categorías:
- Fundamentales. Capacidades mínimas necesarias para utilizar las tecnologías digitales, como el uso de un navegador, el acceso a Internet y el uso de contraseñas.
- Para la comunicación. Capacidad de enviar e-mails correctamente, adjuntar archivos y utilizar redes sociales.
- Para la gestión de información y contenidos. Saber utilizar los buscadores, entender que no todo el contenido online es fiable y acceder al contenido desde varios dispositivos.
- Para las transacciones. Posibilidad de crear cuentas para utilizar o comprar bienes y servicios online, utilizar métodos de pago seguros y rellenar formularios online.
- Para la resolución de problemas. La capacidad de encontrar soluciones a los problemas utilizando páginas de preguntas frecuentes (FAQ), tutoriales y/o chats, identificar soluciones recurriendo a un software y mejorar la productividad.
- Para la seguridad. Entender las buenas prácticas para guardar y compartir datos, actualizar y proteger las contraseñas y tomar precauciones contra los virus.
Competencias digitales avanzadas
Las competencias digitales avanzadas son indispensables para cualquier persona que desee trabajar en el sector digital. Cada una tiende a referirse a un trabajo concreto.
Un ejemplo típico es de los lenguajes de programación, pero también encontramos:
- Marketing digital
- Marketing en redes sociales
- Web Analytics
- Desarrollo de apps
- Análisis del negocio digital
- Diseño digital
- Gestión de proyectos digitales
- Análisis de datos
Competencias digitales, hard y soft
Algunas teorías identifican las digital skills como una categoría de competencias independientes respecto a las soft (transversales) y las hard (técnicas).
Otras clasificaciones distinguen entre digital soft skills y digital hard skills.
Las digital soft skills incluyen competencias transversales que permiten que los trabajadores utilicen correctamente las herramientas digitales.
Algunos ejemplos son:
- Alfabetización digital. Capacidad de acceder y gestionar la información mediante dispositivos digitales.
- Comunidad virtual. Capacidad de gestionar la comunicación y las relaciones sin contacto físico.
- Team working digital. Capacidad de formar parte activa de un equipo, incluso en remoto.
- Resolución de problemas con apoyo digital. Saber resolver problemas utilizando dispositivos digitales.
Las digital hard skills, por su parte, son competencias técnicas que se adquieren durante los estudios o en el lugar de trabajo y que permiten desempeñar un puesto.
Entre ellas se encuentran, por ejemplo, los lenguajes de programación y todas aquellas nociones que permiten que un trabajador utilice máquinas y software para llevar a cabo sus tareas.
Se pueden agrupar en 6 categorías principales:
- Sociales
- Móviles
- Analytics/Big Data
- Nube
- IoT (Internet de las cosas)
- Ciberseguridad
Origen de las competencias digitales
Dada la reciente y repentina atención que se está prestando a las competencias digitales, se podría caer en el error de pensar que han surgido en los últimos años.
En realidad, las competencias digitales existen desde la creación de los primeros ordenadores modernos y, por tanto, desde hace varias décadas. Sin embargo, antiguamente solo una pequeña minoría de trabajadores poseía estas competencias.
Año tras año, se fueron haciendo imprescindibles para un número cada vez mayor de personas, hasta alcanzar su máxima relevancia durante la pandemia, cuando el teletrabajo obligó a millones de trabajadores a comunicarse, colaborar y trabajar virtualmente.
Por su parte, las digital hard skills se han ido especializando cada vez más. Antiguamente, los programadores eran en su mayoría expertos en varios lenguajes, pero actualmente se suelen especializar en un número muy reducido de códigos.
La situación en España y en el mundo
No es ningún secreto que España no se encuentra entre los países más digitalizados del mundo, pero sí que es cierto que la situación está evolucionando.
Según el Digital Skills Index de Salesforce, una encuesta sobre el nivel de competencias digitales en el mundo laboral, un 60 % de los trabajadores a nivel mundial considera que no posee las competencias digitales que buscan las empresas en la actualidad y un 66 % no se siente preparado para los próximos cinco años. Sin embargo, únicamente un 28% de los trabajadores está inscrito en algún curso que le permita eliminar esta carencia. El Digital Skills Index de Salesforce incluye muchas otras estadísticas interesantes sobre las que puedes seguir leyendo en su web oficial.
Otro estudio fiable es el DESI (Índice de la Economía y la Sociedad Digitales), elaborado por la Unión Europea y cuya última actualización se publicó en 2021, que sirve para supervisar la competitividad digital de los Estados miembros.
Esta encuesta muestra que en España el 57 % de las personas de entre 16 y 74 años ha desarrollado competencias digitales al menos de nivel básico, ligeramente por encima de la media europea, que se sitúa en el 56 %.
El 36 % de los españoles posee competencias digitales avanzadas, frente a la media europea del 31 %, y solo el 3,8 % de los licenciados españoles elige el sector de las TIC.
Encontrarás más información sobre los resultados y la metodología de este estudio en este informe.
Los efectos de la brecha de competencias digitales
Actualmente se habla muy a menudo de las competencias digitales, algo que se debe principalmente a dos razones.
La primera es que un número cada vez mayor de puestos de trabajo están estrechamente relacionados con estas competencias, que suelen ser muy especializadas.
La segunda es que la falta de estas competencias en la población repercute cada vez más en la productividad y, por tanto, en la economía.
Veamos algunas cifras recientes.
- Un estudio de la Unión Europea publicado a finales de 2018 augura que 9 de cada 10 puestos de trabajo requerirán competencias digitales en el futuro. El Informe sobre el Futuro del Empleo 2020 del Foro Económico Mundial también llega a la misma conclusión.
- Según el estudio Empleabilidad y Talento Digital 2021, en España existen 7000 vacantes en el sector de las TIC que no llegan a cubrirse.
- Un estudio del Boston Consulting Group estima que, en 2025, este desfase digital nos costará entre el 8 % y el 11 % del PIB mundial.
Competencias digitales y brecha de género
La aparición de nuevas profesiones digitales podría representar una oportunidad para reducir la brecha de género en el mundo laboral.
En España, por desgracia, todavía no se vislumbra ese futuro.
De hecho, existe una gran diferencia entre hombres y mujeres en el mundo laboral de las TIC, donde la presencia femenina solo representa el 20 % del total.
La brecha también es bien visible al fijarse en las competencias digitales básicas, donde los hombres se sitúan ligeramente por encima. En concreto, las mujeres poseen con menos frecuencia competencias digitales relacionadas con la resolución de problemas y el software, mientras que tienden a mostrar una mayor experiencia en comunicación. Fuente: eige.europa.eu.
En Europa, en solo seis países las mujeres se encuentran por delante en esta clasificación concreta y en España los resultados se encuentran muy cerca de la media europea.
Para que estas cifras mejoren, es necesario que se produzca una revolución cultural que rompa con los prejuicios que hacen que los hombres se consideren más aptos para los trabajos digitales.
Competencias digitales para los profesionales de los RRHH
La transformación digital también ha afectado de lleno al mundo de los Recursos Humanos, multiplicando la eficiencia de muchos procesos.
Precisamente por eso, el departamento de RRHH de tu empresa debe disponer de las competencias necesarias para aprovechar al máximo la tecnología en la nube y llevar a cabo el trabajo y las relaciones correctamente en un contexto digital.
La oferta formativa es cada vez más amplia. Los másteres y cursos universitarios dedicados a los Recursos Humanos prestan una gran atención al componente tecnológico y hay cursos dedicados como el Máster en Dirección de Recursos Humanos y Transformación Digital de las Organizaciones de la EUDE, el Programa Avanzado en RRHH Digital de la UNIR o el de Dirección de RRHH y Desarrollo Digital de Talento del IEP.
Veamos algunas competencias digitales especialmente relevantes en la actualidad para trabajar en el mundo de los RRHH.
Alfabetización digital
La alfabetización digital —un conocimiento general de las herramientas informáticas y los nuevos medios— es un requisito imprescindible para casi todas las profesiones, incluidos los RRHH.
Para desempeñar correctamente su trabajo, un profesional de los RRHH actual deberá utilizar múltiples programas no solo en ordenadores, sino también en tablets y smartphones.
HR Tech
También es importante conocer la oferta de software específico para la gestión de los Recursos Humanos y su funcionamiento general. Saber qué es un ATS o un LMS, cuáles son las ventajas de un software en la nube y qué características debe tener una buena plataforma de gestión de RRHH es crucial en este sentido.
Lo ideal sería, asimismo, saber utilizar una o dos plataformas concretas correctamente.
Redes sociales
Una parte importante del trabajo de un profesional de los RRHH —sobre todo de los reclutadores— tiene lugar en las redes sociales.
Así pues, es necesario contar con las competencias digitales relacionadas con este mundo, como, por ejemplo:
- Capacidad para redactar y compartir anuncios de empleo en redes sociales y desarrollar campañas de employer branding.
- Capacidad de utilizar las redes sociales para comprobar los antecedentes de los candidatos y corroborar la selección.
- Capacidad de comunicación con usuarios, candidatos y empleados en plataformas sociales.
Entrevistas virtuales
Una buena parte de las entrevistas se realizan en la actualidad utilizando herramientas de videoconferencia.
Por lo tanto, un reclutador debe tanto estar familiarizado con este tipo de software como desarrollar sus habilidades de comunicación e interpersonales para realizar entrevistas en un contexto virtual.
Análisis de datos
El uso de herramientas digitales también implica recopilar una cantidad importante de datos bien organizados. Con los conocimientos adecuados, un profesional de RRHH puede extraer estadísticas y KPI que se pueden utilizar para tomar decisiones y mejorar los procesos.
Marketing digital
El marketing está lleno de estrategias de éxito que se pueden aplicar a la gestión de los RRHH. Un ejemplo es el de la teoría del funel o la de los touchpoints.
El desarrollo de este tipo de competencias permite que un profesional de los RRHH modernice y aumente la eficacia de los procesos de RRHH de una empresa.
Cómo desarrollar las competencias digitales del personal
El desarrollo de las competencias digitales de los candidatos y empleados requiere un análisis de la situación actual.
Por ese motivo, el primer paso es mapear las competencias existentes en la empresa y su nivel para identificar las brechas que habría que cerrar y las oportunidades que hay que aprovechar.
Es necesario hacer un seguimiento y una evaluación de las competencias importantes a nivel de empresa, de puesto o personal para comprobar su progreso.
El proceso clásico top-down, efectuado algo más de una vez al año, sigue siendo la forma más eficaz para las empresas, ya que no requiere demasiado esfuerzo y proporciona datos adecuados con los que se pueden elaborar estadísticas. Una autoevaluación por parte del trabajador garantiza una reflexión en mayor profundidad.
El resultado de las evaluaciones permite organizar un plan de formación más eficaz y específico.
Dada la velocidad con la que evolucionan muchas competencias digitales —especialmente las hard skills—, es probable que haya una mayor preferencia por los cursos presenciales tradicionales que por los métodos de enseñanza más modernos y dinámicos, como el microaprendizaje.
Aprovechar la tecnología
Para desarrollar las competencias digitales del personal, también es necesario proporcionar herramientas modernas y, evidentemente, digitales.
Todo ello empezando por un software de evaluación y formación, que hace que estos procesos sean mucho más eficaces.
Un software en la nube, como Altamira Performance y Altamira Learning, ofrece muchas ventajas:
- Mayor compromiso y autonomía para los empleados.
- Mayor participación en los procesos.
- Transparencia en los procesos de evaluación y en la oferta de formación corporativa.
- Seguimiento automático de los cursos efectuados y de la evolución de las competencias.
- Automatización a la hora de calcular la brecha de competencias, la asignación de las competencias al personal, etc.
- Capacidad de elaboración de informes y KPI.
